El sol despiadado y la alta temperatura del aire en Francia durante muchas semanas han tenido el efecto más perjudicial en el desarrollo de los cultivos agrícolas.
Como resultado, tanto la agricultura francesa como la industria ganadera sufren; como resultado de la sequía, no es posible proporcionar al ganado local forraje y heno.
Según Didier Guillaume, quien encabeza el Ministerio de Agricultura francés, hoy las autoridades del país están pidiendo a los agrarios que demuestren la máxima coherencia y solidaridad durante los tiempos difíciles para el estado.
Por su parte, el gobierno francés promete proporcionar subsidios estatales a los obtentores estatales en un futuro muy cercano, cuyo monto total será de mil millones de euros. Este dinero se asignará para que los criadores locales puedan comprar paja para sus animales.
En este momento, los expertos están calculando la cantidad total de daños que la sequía causó en el complejo agroindustrial del país. Tan pronto como se anuncie la cantidad, los agricultores que sufrieron como resultado del calor y perdieron la cosecha serán compensados por el daño.
Se sabe que el dinero para la asignación de la compensación se tomará del fondo nacional de la Oficina de Riesgos Agrícolas.